miércoles, 2 de junio de 2010

Aromas de hoy

Hoy te añoré como nunca
mientras olía tu recuerdo.

Hoy te pensé como eras,
con tu gusto y con tu look de chica bien
y de chica bien rica.

Hoy pensé que seguro olerás igual todavía,
como cuando venías
y me abrazabas fuerte,
y me hacías creer
que era el último hombre sobre la tierra.

Hoy me arrepentí de haberte dicho
que tu aroma no me gustaba,
me arrepentí de corazón,
porque hoy siento
que no existe olor más rico
que el olor de tu cuerpo
impregnándose en mi cuerpo
cada vez que me abrazabas.

Hoy valoraré tu aroma perdido.

Hoy sentí que nada de lo pasado
ha pasado realmente.

Hoy sentí que el tiempo se estancó en nosotros
mirando una película ridícula,
yo riéndome de burla y tú llorando de pena,
y después comiendo juntos
un heladito en pleno invierno.

¡Bah!

Hoy te busqué,
quise hablarte,
quise escucharte,
pero tú ya estabas lejos,
muy lejos.

Hoy sólo olí tu recuerdo
esperando que se me impregne,
queriendo que no te vayas nunca,
rogando tenerte siempre.

Hoy deseé desesperado
haber podido amarte
sin pensar en mis enredos,
sin mirar a mis nostalgias.

Hoy... hoy fue un día normal.